LA GENEALIDAD ESTA INTIMAMENTE LIGADA A LA LOCURA. w. duarte.

domingo, 29 de agosto de 2010

El tiempo

Hay quienes dicen que el tiempo es sinónimo de dinero, o que el tiempo vale oro, lo que es totalmente cierto. En lo que inviertes tu tiempo (financieramente invertir es utilizar recursos para aumentar las riquezas) determina si has ganado o perdido en tu tesoro personal, el oro que almacenas, las riquezas de tu vida, lo que te hace ser quien eres.

Si utilizamos la anterior información y la traducimos en una sencilla ecuación obtendríamos que si el tiempo es igual a riqueza, cada vez que el tiempo es mal invertido le restamos a nuestras riquezas, y por consecuencia cada vez que utilizamos nuestro tiempo de forma inteligente y sabia aumentamos nuestras riquezas. Siendo las riquezas igual el enriquecimiento personal, que de alguna forma todos buscamos. Evaluemos un poco nuestros actos.

Cuando te dedicas a pensar en el pasado; estás perdiendo el tiempo. Pensar a futuro, planificar y tener una visión te hace caminar y aprovechar cada minuto para llegar a ese objetivo, estás invirtiendo tu tiempo. Un día llegarás y habrá valido la pena la inversión.

Si dedicas tus pensamientos a quienes te han dañado; estás perdiendo el tiempo. Dedicar algunos minutos a perdonar y sanar tus heridas, es invertir el tiempo. Pronto podrás ayudar a alguien más.

Si dedicas unas líneas o muchas páginas de un escrito a criticar o dañar a otras personas; estás perdiendo el tiempo. Las letras son una forma de expresar, son un arte, son belleza. Escribir para embellecer la vida de otros eso es invertir el tiempo, para alguien tus letras podrían ser la diferencia, dar un rayito de luz en el momento en que las lea.

Cuando tienes la oportunidad de charlar con un amigo y te dedicas ala habladuría sin sentido; estás perdiendo el tiempo. Juzgar a otros no te dará la satisfacción que te dará el escuchar a un amigo y aconsejarlo, o reírse de lo divertida que es la vida; eso es invertir el tiempo. Un día podrías necesitar que alguien te escuche y te sobrarán oídos dispuestos a hacerlo.

Esforzarte por ser alguien que no eres, por complacer a otros; es perder el tiempo. Hemos sido diseñados para ser perfeccionados día a día, no para ser falsas imitaciones, invertir el tiempo es dedicarnos a crecer, esforzarnos en corregir aquello que nos aleja de la razón para la que fuimos creados, la razón por la que Dios no creo.

Si al final, te das cuenta que estás perdiendo tu tiempo, es un buen momento para empezar el cambio, aumentar tus riquezas. Eso es invertir el tiempo.